Con el paso de los años, es común encontrarnos con ralladuras y fisuras en nuestras paredes. Antes de abordar la reparación, es esencial entender la diferencia entre roturas, fisuras y grietas.

Roturas:
- Pequeñas, aproximadamente 1 centímetro de profundidad.
- Afectan solo la pintura o el yeso.
- Fáciles de corregir con el siguiente procedimiento.
Fisuras:
- Más profundas, de 1 a 3 centímetros.
- Seguras si no permiten el paso de agua, viento o luz exterior.
- Cuidado cerca de vigas, columnas o losas; llama a un profesional si es necesario.
Grietas:
- Más de 3 cm de profundidad, potencialmente peligrosas.
- Requieren atención profesional para evitar ocultar problemas estructurales graves.
Pasos para Reparar Fisuras en Paredes
Materiales Necesarios:
- Guantes de Goma
- Máscara de Protección
- Lona de Plástico
- Papel para Lijar
- Llana Lisa (plástico o metal)
- Espátula
- Cepillo
- Masilla o Producto Similar
Procedimiento:
- Preparación del Área:
- Coloca una lona alrededor del área para evitar ensuciar.
- Usa guantes y máscara para protección personal.
- Eliminación de Trozos Suelto:
- Con la espátula, retira con cuidado trozos sueltos en la rotura.
- Limpieza con Cepillo:
- Usa un cepillo para eliminar todo el polvo restante.
- Aplicación de Masilla:
- Asegúrate de que el área esté seca.
- Aplica la masilla gradualmente hasta llenar la rotura.
- Nivelación con Llana Lisa:
- Utiliza la llana lisa para distribuir uniformemente la masilla.
- Tiempo de Secado:
- Deja secar de 24 a 48 horas.
- Lijado Final:
- Usa papel de lija para eliminar imperfecciones.
- Pintura Final:
- Pinta el área reparada del color de la pared.
Con estos sencillos pasos, podrás solucionar el problema por ti mismo. Si no estás satisfecho, sigue practicando o consulta a un profesional para obtener resultados óptimos. ¡Repara tus paredes con confianza!